La microdosis es la práctica de tomar cantidades superpequeñas de psicodélicos, como la psilocibina natural, de manera regular. El objetivo de esta práctica es recibir diversos beneficios sugeridos mientras se mantiene un nivel subperceptivo (imperceptible) de intoxicación.

1-2 horas después de ingerir una microdosis de psilocibina (trufas u hongos), la mayoría de los usuarios pueden notar un aumento de la concentración, la energía y una actitud más satisfactoria y significativa hacia la vida. La mayoría de los microdosificadores explican esta sensación como – “un gran día en el que tu estado de ánimo es bueno como si hubieras dormido lo suficiente, hecho ejercicio y comido muy bien”. Algunos también describen otros cambios personales como el aumento de la empatía o sentimientos similares relacionados con el enfoque y el estado de ánimo. La mayoríade los usuarios también afirman que la microdosis de psilocibina les permite estar más presentes en el momento.

La regla general es que se deben tomar microdosis de psicodélicos no más de cada 3 días. Esto puede parecer extraño para algunas personas inexpertas que están acostumbradas a tomar suplementos todos los días, pero es muy lógico hacerlo.

Nuestros cuerpos son muy activos cuando se trata de crear anticuerpos y otros organismos de defensa contra los psicodélicos. Es por ello que los hongos/trufas, que contienen psilocibina natural, no funcionan igual el día después de tener una experiencia psicodélica. Tienes que tomar significativamente más mientras recibes menos efectos.

Los mismos patrones deben respetarse cuando se toma una microdosis. Asegurándose de sólo dar una microdosis cada 3 días más o menos, puede darle tiempo a su cuerpo para volver a la tolerancia normal. Algunos microdosificadores experimentados también sugerirán que se tomen períodos de tiempo más largos cuando no se esté tomando ninguna microdosis. Esto puede ser un hábito saludable, como todo lo demás, para permitir que tu cuerpo descanse de ciertos estados/compuestos.

Sin embargo, no todas las personas son iguales, por lo que también es común distintas formas de uso. Por ejemplo, tomarla durante dos días, detenerla un día y luego repetirla. O tomarlo durante cinco días, parar dos días, y luego repetir. Es importante que la dosis se mantenga por debajo de los efectos perceptibles de la alucinación. Pero lo más importante es escuchar a tu cuerpo.

La recomendación es entre 0,5 y 1,5 gramos. Algunas personas con más experiencia pueden aumentar esta dosis, pero siempre escucha a tu cuerpo. La razón de esto es que las personas no son iguales en cuanto a peso, longitud, sexo, etc.

En la mayoría de los casos, uno de los mejores efectos de la microdosis se nota cuando se trata de varios tipos de adicciones y salirse de ella. Otro campo común cuando los usuarios buscan ayuda con la microdosis, es la depresión y los problemas relacionados con la ansiedad. Dicho esto, existen distintos impactos de la microdosis:

• Pico de rendimiento
• Aumento de la creatividad
• Aumento de la confianza en uno mismo
• Mejor salud física (o sensación)
• Más fácil de acceder al estado de flujo
• Mejor solución de problemas
• Mejor enfoque
• Más empatía
• Más presente en el momento
• Sentimientos de propósito
• Dormir mejor
• Sentirse más positivo

Desde una perspectiva de tratamiento, la creencia general es que la microdosis puede potencialmente ayudar a lidiar con el estrés, la ansiedad, mejorar los patrones de sueño y el estado de ánimo, el dolor de la menstruación, ayudar con los dolores de cabeza (incluso reducir la migraña), y finalmente aliviar el dolor.

Una dosis recreativa completa de cualquier droga psicodélica puede variar ampliamente en función del nivel de tolerancia, el nivel de experiencia, los efectos esperados y muchos otros factores. La práctica de la microdosis trata de hacer que los psicodélicos trabajen para nuestro bienestar sin intoxicarnos realmente.

Esto significa que aquellos que comienzan a tomar microdosis buscan una dosis perfectamente equilibrada que funcione personalmente para ellos. Esta microdosis no tiene que traer ningún efecto notable asociado con la intoxicación psicodélica, mientras que sólo mejora ligeramente su día.

Parece una paradoja darse cuenta que el acto de la microdosis es en realidad “encontrar la dosis perfecta que no tiene ningún efecto en mí y que me da todos los efectos que hacen que mi vida diaria mejore”.

En otros términos, se puede ver de esta manera; una dosis recreativa activa completa te traerá una paleta completa de efectos muy notables, mientras que una microdosis mantendrá las cosas subperceptivas (imperceptibles).

Una de las condiciones más populares por las que la gente está interesada en la microdosis, es que buscan ayuda para lidiar con su depresión o ansiedad.

Como con todo, la microdosis – la ciencia aún tiene que probar cualquier afirmación cuando se trata de microdosis de psicodélicos. Pero muchos usuarios de microdosis reportan estados de ánimo elevados y menos estresantes después de la microdosis.

Existen muchos informes personales cuando se trata de microdosis de psicodélicos para salir de una depresión o estados similares. Pero no deberías tratar las pequeñas dosis de psicodélicos como la píldora mágica que te quitará todas las preocupaciones y te hará sentir mejor.

Tendrás que mejorarte a ti mismo. Eres tú quien tendrá que centrarse en cambiarte a ti mismo, tus hábitos, comportamientos y patrones psicológicos, para convertirte en una persona segura, feliz y que se sienta valorada por la sociedad. Los psicodélicos, en algunos casos, pueden ser ese primer peldaño (tanto en dosis recreativas como de héroe, o microdosis diminutas).

Existe alguna evidencia científica cuando se trata de tomar psicodélicos y de disminuir el nivel de ansiedad y depresión, incluso mucho después que los efectos directos hayan desaparecido. Pero los científicos no pueden entender completamente cómo, cuándo y en qué condiciones se pueden usar los psicodélicos para ayudar a las personas con sus condiciones mentales.

Una cosa si si se tiene claro; los psicodélicos (tanto en cantidades bajas como altas), pueden tener un poder significativo para permitirnos aprovechar un inmenso, no totalmente comprendido, potencial que nuestra mente posee. Pero para usar ese potencial, tendremos que ser nosotros los que hagamos el trabajo duro. Los psicodélicos pueden abrir algunas puertas que tal vez no encontremos por nosotros mismos. Pero atravesar esa puerta y vivir al otro lado, lo tenemos que hacer nosotros intencionalmente.

En resumen, si estás leyendo esto es porque crees que la microdosis de psicodélicos puede ser la solución correcta para ayudarte a luchar contra la depresión, puede que sea cierto. Pero aún así será tu lucha la que tendrás que ganar. Y se necesitará algo más que buenos hábitos, ejercicio diario, una dieta saludable, socializar, meditación, escribir en un diario y tomar microdosis para recuperarse completamente. ¡Se necesitará su completa determinación!

Importante: si sufres de depresión maníaca, la microdosis no te ayudará. Puede empeorarla, por lo que no tienes permitido usarla.

Sí. Si la microdosis eleva tu estado de ánimo y te hace más presente, y por lo tanto más relajado, puede ser una gran manera de ayudarte a luchar contra cualquier adicción que puedas tener. Tendrás que hacer la mayor parte del trabajo duro, “no tomando la sustancia a la que eres adicto”. Pero estar de mejor humor puede hacer que esta lucha sea un poco más fácil para ti.

Por eso, al luchar con antidepresivos, alcohol, cannabis, tabaco o cualquier otra adicción,  la microdosis puede facilitar el día a día. El factor clave es la ‘reducción’. Esto significa que disminuyes lentamente la cantidad de sustancia a la que eres adicto.

Otro beneficio puede provenir de una perspectiva de “cambio de hábito”. En la mayoría de los casos, luchar contra una adicción no sólo significa “no hacer algo” más, sino que también significa reformar tus rutinas y hábitos para “eliminar” los malos hábitos que se salieron de control.

En este sentido, sentir que cambiaste la adicción al X, con un hábito de microdosis puede ser una piedra angular de la lucha que estás a punto de emprender. Nuestros cerebros están conectados de una forma en la que cambiar un mal hábito por uno mejor, puede ser a veces más fácil que desechar un hábito adictivo sin tener nada que nos ayude a distraernos de los impulsos.

Así que si necesitas luchar contra una adicción que podrías tener, una de las maneras podría ser el cambiar tu mal hábito con un hábito de microdosis. De esta manera, cada tres días podrás tener ese momento de cierre que te recordará por qué tienes que hacerlo. La microdosis elevará tu estado de ánimo, y por lo tanto, puede ser útil para resistir los poderosos impulsos que tendrás en el camino.

Las trufas mágicas contienen los siguientes valores nutricionales. Por lo tanto, pueden ser consumidas debido a sus nutrientes. Para la construcción, el suministro de energía y la regulación del organismo humano. Estos son nutrientes esenciales para los humanos.

NOTA: Las trufas mágicas contienen naturalmente las sustancias Psilocibina y Psilocina. La Psilocibina y la Psilocina son alucinógenos. Los alucinógenos son sustancias con un efecto de alteración mental que pueden inducir alucinaciones. Cuando consumas Trufas Mágicas, toma en cuenta el efecto de estas sustancias seriamente y siempre mantén las Trufas Mágicas fuera del alcance de los niños debido a estas sustancias. Guarda las Trufas Mágicas en un lugar oscuro, seco y fresco entre 2 y 4 ℃.

No lo utilices durante el embarazo, al usar medicamentos o cuando sufras trastornos psicóticos, daltonismo, autismo o depresión maníaca. Nunca lo combines con alcohol o cualquier otra droga. No conduzca cuando hayas tomado más de la cantidad prescrita. No se permite la venta a menores de 18 años. Si tienes alguna duda, ponte en contacto con tu médico de cabecera.